21 de junio de 2008

EN LLAMAS!


Maravilla de sensaciones me inundan

Cuando me tocas.

Tu toque, una caricia casi imperceptible,

Un roce que eriza mi piel y enciende

Mi cuerpo.

Mi cuerpo, servidor de tus manos,

Víctima voluntaria de tus besos arrolladores.

Motor que funciona con un suspiro tuyo.

Me hablas sin palabras, me llenas de

Mensajes como a una página de diario íntimo;

Sólo tu boca es la pluma de este secreto.
En llamas!


Sacas chispas cuando te acercas.

Me abrasas y me abrazas.

Calor inconmensurable,

Me absorbe y me transporta a un mundo paralelo;

Sólo dicha hay. Bendita unión entre hombre y mujer, comunión,

Fusión sellada con besos y gestos,miradas, suspiros...

Amor...

Surge la palabra como el más pequeño capullo

De rosa que florece inesperadamente.

Me convences, me persuades, me diriges a lo más

Abstracto e incorpóreo, por medio de lo más físicoy tangible...


Tú y tu contacto, yo y mis sentimientos.

Todo reducible a los dos.

Cáliz y vid sagrada, cuerpo y alma.
Ya no hay ruta. Labios y manos recorren sin guía...


Nos buscamos, nos encontramos y

Juntos nos perdemos.

Jugamos. Pedimos, exigimos, sin

Palabras, damos sin reclamos, cedemos

Juntos al más sagrado instinto.


Me llevas, te tengo.

Te acercas, me pierdo.

Me besas, te envuelvo.

Sin cadenas, libertad de manos, piernas y labios

Sin orden.

Sin límites.

Ya no sé dónde acabas tú y
Comienzo yo.

Siento que vuelo. Me elevas a la más exquisita

Profundidad, para luego descender a la sima del

Alto cielo. Bendita intimidad, regalo que me haces y

Te dedico. Instancia que se pierde en nuestra

Existencia.


Te conozco, me sabes de memoria. Sin secretos.

Perdemos un poco de "yo" para entregarnos,

Extasiados, al "nosotros"
Somos autores de nuestra propia historia, escrita

En el piso, en la cama, en el cielo...


Somos pincel y somos óleo; nos plasmamos en

La tela blanca que es la vida, dejando nuestra huella.

Tú y yo. Bendita verdad que no dejo de venerar, adorar,

Apreciar...


Te quiero y quiero más.
Te amo y soy amo de tus sentimientos.
En la oscuridad y en la luz del día,

Nos reímos del empirismo y las leyes

Absolutas, pues sabemos amarnos más

Allá de lo explicable y de lo inexplicable.

Más allá...

En llamas!


6 de junio de 2008

Annie the Nanny

La clásica portada que me disuade de ver este tipo de películas, aún cuando una gran actriz en despegue y otra con su rol ya ganado me tienten... vamos, vean esa portada, no incita a quedarse en casa mirando otra peli de niñeras!! Prefiero la serie con Fran Drescher!! (y con eso cuánto digo!)

El hecho es, ante este film me encuentro en casa, y sin mejores planes me cargo el refrigerador entero, cómodo sofá y Scarlet y Laura. Ahora, antes de decirles qué me pareció, comentaré brevemente de qué va.


ARGUMENTO

Annie es la típica chica humilde pero luchadora de New Jersey que termina sus estudios de Antropología con honores, cumpliendo su sueño y además, acercándose cada vez más a lo que tanto la apasiona: el sentido de permanencia y pertenencia entre familias de diferentes culturas.


Lástima que su acercamiento no llegue más lejos que sus libros y el Museo de Arte Natural...Muy confiada en señales del destino, Annie se ve abordada por una oportunidad que cree (y no se equivoca) le va a cambiar la vida: trabajar como niñera para una familia muy rica.




Entre un niño pequeño, conflictivo y desatendido; una jefa que cada día es más intolerable como distante de su hijo y una gran mentira a su madre, que cree que posee un gran trabajo, Annie ve cómo poco a poco se va alejando de su pasión por la antropología en ese verano.


Estamos hablando de una comedia con tintes dramáticos dirigida por el matrimonio que forman Robert Pulcini y Shari Springer, una pareja que estuvo nominada al Oscar por 'American Splendor'. Basándose en la novela "Los diarios de Nanny", adaptaron el guión y el personaje principal para que la sexy y ya consabidamente talentosa Scarlet lo interpretara.


Vamos, he visto críticas que hablan de una suerte de "Mary Poppins del S.XXI", y creo que el error está en algunos elementos que se reúnen en el film para conformar una idea común. Bien, la sombrilla roja, la nana volando, el toque de magia... es todo simbólico en Diarios de una niñera, pues no se trata de Annie como niñera sino de Annie autodescubriéndose.


Digamos, de algún modo, es Annie, la antropóloga, la que se sostiene de esas fantasías de niña para explorar ese excéntrico rol de adulta: ella misma.Y es que Annie no sabe qué hacer de su vida, aún cuando ya tiene un título universitario y veinte tarjetas de mamás desesperadas por una nana culta.
Y la nana culta se querrá matar cuando compruebe que ser mamá sustituta de un diablillo no es lo más llevadero cuando de experimentar se trata. Ahora bien, en ese "mini-mundo" de mamás con mucho dinero, vestidas de Dior y Channell, con tantas preocupaciones como a qué spa asistir y qué peinado escoger, Annie encuentra un buen trabajo de campo... sólo que lo descubrirá cuando pueda pensar nuevamente, es decir, cuando no corra tras el pequeño (que le va tomando cariño progresivamente) porque cometerá algún desastre, o cumpla una nueva orden de la mujer que paga sus honorarios (la mamá perfecta, Laura Linney)


Descubrirá, además, cuánto hay por incursionar en las apariencias que cada vez se empeñan más en erigir esas mamás, que dejan de ser madres porque no tienen tiempo, para convertirse en las perfectas esposas engañadas, o vaya uno a saber qué otra cosa que cause lástima.


CONCLUSIÓN


Hay mucho de lo típico en comedias de niñeras, las cuales tuvieron su auge y no alcanza a contarse con los dedos, pero esto se da sólo en las escenas de Johanson y el niño.

Luego, en las reflexiones de la recién graduada, en su particular forma de ver las cosas, hay un film aparte, que no llega a la brillantez pero tampoco se estanca en "uno más de tantos otros"Scarlet tiene talento, eso ya lo sabemos, pero también desborda sensualidad, lo cual no la hacen el perfil ideal para el papel de nana. Sin embargo, en este film está lo suficientemente retocada para aparecer menos despampanante, bonita pero no exuberante.


Laura Linney brilla en su papel. Puedes sentir lástima y creerte la situación.... desde el sofá o la sala de cine.


En cuanto a la dirección, está muy bien lograda. Se lleva un hilo conductor que convence, la fotografía es muy buena y las ideas locas estilo Johanson viajando en la sombrilla, lo que representa claramente su búsqueda de estabilidad, le dan al film un touch de comedia y drama a la vez.


Así, pues, muy bueno. Para disfrutar en familia... o sola/o, si eres de los que aun se están por descubrir profesionalmente e insisten en probar otras experiencias laborales -me lo conozco como si lo estuviera viviendo ;-)